- 1 medida de aceite de oliva de 0,4º.
- 1 medida de leche un poco abundante.
- 25 gr. de levadura fresca prensada de panadería.
- 1 cucharada de postre y un poco más de sal (tomando como medida una taza de merienda).
- La harina que admita.
- 1 huevo.
Utensilios y material necesario:
- Papel de horno.
- Un paño limpio.
- Rodillo de amasar.
- Pincel.
Preparación:
1. Calentar
el aceite con un cachín de pan dentro y cuando éste esté dorado retirarlo, quitar el aceite del
fuego y dejar que enfríe hasta que esté tibio.
2. Entre
tanto mezclar la leche la sal y la levadura en un bol hasta que esta última se deslea.
3. Una vez
tibio el aceite, añadir a la mezcla anterior y batir hasta que quede
homogénea. Añadir la harina que admita (hasta que no se pegue
a las manos). Tapar la masa con un paño y dejar reposar al menos media hora.
4. Extender
la masa con el rodillo, cortarla de en rectángulos del tamaño que queramos hacer los bollinos y colocar sobre cada uno de ellos, en uno de los extremos, un trozo de chistorra, humedecer con un poco de agua el otro extremo de la masa. Cerrar primero los
extremos de lo que será el bollín y luego enrollarlo sobre sí mismo.
5. Colocar sobre la bandeja y pintar con huevo batido. No pinchar los bollinos.
6. Meterlos en
el horno a 160º C (arriba y abajo) hasta que se doren.
Notas:
- La masa se puede congelar.
- Es una masa muy versátil, a la que podemos dar múltiples usos y que se puede rellenar de mil cosas (Marisa la utiliza también, por ejemplo, para hacer empanada de manzana).
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